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Julio Anguita, la Transición y la sabiduría con lucidez

Julio Anguita está (casi) tan mayor como yo, lúcido como cuando era alcalde de Córdoba, y aunque me saca 15 años, eso quiere decir que como poco tiene 15 años más de sabiduría. 

Escucharle es un premio y una pena, ambas cosas, pues uno se da cuenta de la distancia de la política joven actual con la vieja de gayata. 

Esta entrevista se la hicieron antes del Debate de Investidura de Pedro Sánchez, pero además habla de la Transición, pone el dedo en la llaga de todo lo que se mueve y es un documento para conservar.

Billete antiguo de Londres Aeropuerto

A veces los coleccionistas nos encontramos con dudas y faltas de datos en nuestras muestras. Este es un ejemplo. Es un billete de transporte de Londres entre terminales del Aeropuerto. Sabemos que se utilizó un 17 de algún mes, y que debió costar 5 peniques. peor nada más. No es suficiente aunque sea un billete muy interesante y antiguo. Cosas de las colecciones raras.

Urbanismo y Arte en las calles de Moisacc, Francia

En la pequeña ciudad francesa de Moisacc podemos observar esta delicia de urbanismo cómodo, de arte, de paisaje para la calidad contemplativa. No podemos añadir nada más que aplaudir al dirigente municipal que supo plantear esta obra en mitad de una calle, como reclamo también de la sala de Arte que está a su vera, la Galerie Graal. Las ciudades necesitan estos golpes de efecto que las convierten en únicas.

Ojo con saber demasiado. Es peligroso

En 1972 ya nos imaginábamos que "saber demasiado" era un problema y que había que estar enterado lo justo, nunca de más. Pero también observábamos que las máquinas podrían saber más que nosotros y se podían volver peligrosas en los últimos años de la Dictadura. Acabar con ellas parecía la mejor decisión. Perich en aquellos años ya nos avisaba.

Cursillistas de Cristiandad. De Colores

El movimiento de los Cursillistas de Cristiandad tuvo su fuerza más amplia en los años 60 y 70 del siglo XX aunque en este 2019 todavía existen con algunos cambios. Si en un principio eran claramente católicos, ahora siéndolo sin duda, ya hablan más de cristianismo, confundiendo ambos términos para llevarse a sus terrenos ideológicos conceptos muy amplios. Se puede ser cristiano y no ser católico, como todos sabemos.

En noviembre de 1972 se celebró en Zaragoza el 25 Cursillo de Cristiandad para Mujeres, con la asistencia según se puede leer de unas 3.000 mujeres que habían venido del noreste de España. Para los que no conozcan bien este movimiento católico, era llamado también Los de Colores, por su bandera con los 7 colores de Arco Iris. Y su forma de entender la religión laica era muy diferente a la que conocemos hoy. En ella se trabajaba mucho más la alegría, la convivencia, los cánticos alegres y juveniles, el trabajo con niños, la espiritualidad y la relación con la muerte mucho más religiosa.

En la actualidad hay algunas religiones minoritarias dentro de la iglesia cristiana pero no católica que siguen estas líneas de trabajo espiritual y comunal.

6 puntos para aprender a negociar mejor

Negociar es una actividad que muchos de nosotros la tenemos que hacer casi de forma constante, y todos la realizamos varias veces a la semana. Negociar es llegar a acuerdos entre partes que opinan diferente y lo necesitamos hacer con nuestros hijos, con la pareja, con nuestro jefe, en el banco o en un comercio. ¿Pero sabemos negociar bien, nos han enseñado en las escuelas, se puede aprender?

1/ Negociar es pactar, es ceder, es no finalizar con derrotados. Negociar es ganar, pero sin que se note que alguien ha perdido. A veces negociar es perder, pero nunca del todo. Negociar nunca debe ser rendirse. Haz crecer tu autoestima. ¡¡Eres capaz de ganar!!

2/ Hay que saber qué puntos frágiles tiene la otra parte, para hacer más fuertes los tuyos. La información es fundamental. No se puede negociar sin tener todos los datos posibles. Antes, siempre antes, pero que se van ampliando según se va negociando.

3/ Debemos tener muy claros los objetivos que deseamos lograr en una negociación. Dejar mentalmente claros en nuestro interior los puntos mínimos y los máximos. Las zonas que son líneas rojas y por las que NUNCA vamos a pasar. Tenemos que movernos en las zonas intermedias de los objetivos, para afianzarnos hacia la zona positiva. De esta manera observaremos qué está dispuesto a ceder la otra parte y definiremos si hay que ser mucho más duro o si podemos contemplar que la negociación puede ser más sencilla.

4/ Escribe todo. Haz gráficos. Define posibilidades por escrito. Revisa y completa. Modifica y añade los objetivos de la otra parte. Marca con colores los que son inamovibles por ambas partes. Rojo para los imposibles de pisar por ambas partes. Verdes los fáciles y los que sirven para avanzar.

5/ Define tu estrategia de trabajo en la negociación. Planifica los tempos, lo que se debe hablar en cada sesión. No es bueno sacar todos los conejos de la chistera a la vez. Domina los tiempos, los tempos, los sonidos de la sinfonía. Observa el papel de los contrarios, de cada uno de ellos y del conjunto. Es como una obra de teatro donde cada negociador como parte del equipo, está componiendo una música diferente. Aprende a valorar cada instrumento de la competencia. No todos tienen la misma importancia y muchas veces los timbales suena mucho pero no es música sino ruido.

6/ Vigila tus palabras. Marca en tus hojas de trabajo sobre qué temas NUNCA deben entrar tú. Y si te los sacan los demás, recuerda en obviarlos o tratarlos muy superficialmente. Nunca tienes que caer en la trampa de tocar la música que ellos indiquen. Si no toca la flauta, no saques a relucir la flauta. Si acaso muy levemente. La flauta se tocará cuando toque según tu planificación. El orden de las intervenciones de cada parte de la negociación es negociación pura y dura.


Y efectivamente, para negociar con tus hijos o con tu pareja, sobra todo lo dicho anteriormente ¿Aunque… de verdad sobra todo?

Catálogo de IKEA del año 1956

Los catálogos de productos han ido transformándose con los años y los cambios tecnológicos del diseño gráfico y la imprenta. Esta es la portada del catálogo de IKEA del año 1956. No sé si sería ya litografía o tipografía, pero sin duda el diseño de aquellos años era comparado con el actual muy flojo. Hay que comprender los métodos de trabajo, y los que los hemos vivido sabemos claramente lo complejo que era crear un catálogo de marca con calidad.

Cuadernos para el Diálogo no debió morir nunca

Los 15 años de vida de la revista Cuadernos para el Diálogo, desde 1963 a 1978, fue una pequeña bocanada de aire fresco en la España vieja de la Dictadura atroz y eterna. Esta revista, muy respetada en aquellos años por sus firmas culturales, nade de la democracia cristiana con Joaquín Ruíz Jiménez a la cabeza y Pedro Altarés mucho después tomando el timón en los últimos años para intentar salvar el espíritu de la revista.

Eran años duros, de fusilamientos tardíos para mantener los miedos, y dónde la revista Cuadernos para el Diálogo daba espacio a ligeras críticas, por entonces duras críticas, que no siempre las soportaba el régimen militar.

Sí, realmente aunque por aquellos años ya mandaban en España los civiles de la Falange o de la Obra, seguía el poder real en manos de los militares y los banqueros.

Cuadernos para el Diálogo moría tras 336 números de vida democrática desde dentro de la dictadura, sin que nadie supiera mantener al menos su cabecera. Un gran error, pues muere por el éxito de El País y hoy estoy seguro, se apena de no haber sabido mantener el concepto de Cuadernos para el Diálogo, como su revista dominical.

En marzo de 1976, Vitoria se quedó sin dedos

Era marzo de 1976 cuando Vitoria saltó a los medios de comunicación de media Europa por unos asesinatos impresentables en cualquier sociedad, donde murieron cinco trabajadores al salir de la iglesia San Francisco de Asís y otros 150 quedaron heridos. Los detalles de aquella tarde os la dejo a vosotros, buscarlos. Era la forma en la que la policía actuaba contra los trabajadores y estudiantes. 

Humor del fácil que se convierte en mierda de la buena

Esto podría parecer humor del fácil, mierda de la buena, pero no, es una verdad como un templo. Los seres humanos nos comportamos de una forma o de otra según el poder que tengamos. Eso nos lleva a la lógica pregunta: ¿Cuánto poder debemos darle a un hombre para que no se olvide de que sigue siendo un simple hombre?

Los viñetistas han estado preciosos en este dibujo. Aplaudamos a Iñaki y Frenchy por decirnos las verdades.

Sí. Es Londres junto al Támesis. Y viven familias con yate

Esta imagen es de Londres, tal vez de ese Londres algo menos conocido pero todavía céntrico donde se asientan las familias con posibles futuros ya resueltos, y dónde junto a sus casas en las mismas aguas del Támesis ponen a remojar sus propios yates. Siempre y en todas las ciudades, hay varias ciudades conviviendo juntas. Y digo conviviendo porque queramos o no, todas las partes por obligación o sin ellas, tienen que convivir. Vivir juntas.

Ya podemos ver que en Londres hay pobres muy pobres de dormir en la calle, y familias con yate en la puerta de su casa. Con urbanizaciones a las que no se puede entrar con facilidad y donde la seguridad privada en un coste más. Ese urbanismo de calidad y seguridad donde se vive "de otra manera" y con otros costes. Las ciudades siempre con "otra cosa" depende del cómo las podamos ver.