Páginas

Consejos para conocernos mejor y valorarnos

Debemos levantar el ánimo y analizar nuestra situación. Con calma, con reflexión personal, no viendo nuestras circunstancias de manera negativa, sino intentando encontrar los puntos fuertes, que estoy seguro, los hay.

Nada mejor que parar totalmente y sentarnos, poner una hoja blanca a nuestro lado y trazar una línea vertical que divida la hoja en dos partes iguales.

Pondremos a la izquierda los puntos positivos y fuertes de nuestra situación y a la izquierda los puntos negativos.

Siempre —repito para la tranquilidad— salen muchos más puntos negativos que positivos. Es lo normal, no hay que preocuparse por eso.

Vamos a analizar con tranquilidad esos puntos positivos, vamos a intentar potenciarlos, y con ellos vamos a ver qué puntos negativos pueden ser vencidos. Por cierto, hay muchos puntos negativos que en realidad están allí fijos, inamovibles, y que por ello no debemos prestarles una excesivo atención.

Debemos buscar entre los puntos positivos, aquellas oportunidades de ampliar nuestra situación, de mejorar la vida. Hay que cuidar mucho estos puntos.

Debemos mejorar aquellos puntos negativos que sean debilidades personales, son puntos sobre los que podemos actuar y mejorar hasta hacerlos desaparecer. Y evaluar las amenazas que detectamos para ver su importancia real y si podemos actuar sobre ellas para que no sean amenazas reales hoy.

Somos mucho más fuertes de lo que parece, simplemente a veces, es cuestión de conocernos un poco más y mejor.