6.8.25

Humor español de 1974 de JoséMiguel


Este es un detalle del humor del año 1974 en España, cuando todavía vivía el dictador y en España no había democracia aunque se pedía con fuerza mientras se nos engañaba con aquellos Espíritus del 12 de Febrero.

Da la sensación de que 50 años después estamos parecidos. Cambiaria la marca o el modelo de la estufa y tal vez la boina, pero las dudas son similares.

Los españoles siempre estamos en crisis. cuando no era Franco es Trump o nosotros mismos que somos unos torpes.

La revista Ajoblanco dejó un hueco hoy vacío

Nadie (o casi) se acuerda ya de la revista Ajoblanco, o al menos de su primera etapa desde 1974 a 1980, cuando sin duda era una ruptura cultural clara de lo hasta ese momento conocido por la sociedad que vivía en España y dirigida sobre todo a los jóvenes universitarios o trabajadores que entendían de la necesaria lucha obrera, y sobre todo a los modos de la contra cultura que se necesitaba en los años finales de la Dictadura. 

Era una revista con fondo y forma sobre todo en la Barcelona que querían romper con todo lo manido y gris que se movían en la cultura de aquellos años apagados y violentos desde el poder, ofreciendo unas miradas hacia el Arte o hacia lo diferente, que sobre todo por ello, eran imprescindibles en aquellos años.

En 1974 el estudiante barcelonés José Ribas supo recoger a un buen número de jóvenes artistas, poetas, filósofos y dibujantes críticos contra la forma de entender la Cultura que había entonces, para atreverse como editor joven a embarcarse en el proyecto de una revista única en ese momento, que luego siguieron explorando otras marcas.

Se cuenta que en sus momentos de más fuerza editorial, sobre un millón de lectores daban fuerza a esta revista algo libertaria que llegó a imprimir sobre 90.000 ejemplares en sus momentos más álgidos pero que eran números que se pasaban de mano en mano los estudiantes y jóvenes de la época. 

Era un proyecto de vida de los colaboradores pues era un proyecto de romper con los viejo. Y por eso sobre todo en 1980 cerró su primera etapa, volvió a salir al mercado desde 1987 a 1999 como revista crítica contra el poder y ha tenido una tercera etapa desde 2017 con menos números y más centrada en el trabajo digital. 

Siguen muy descontentos con la forma de la cultura actual, como es lógico por ellos mismos y por las escasos rendimientos de calidad que estamos observando en los últimos años. Y por eso su trabajo, siendo fundamental, es orillado pues enseguida los mercados se apoderan de todo lo que sea contracultura pues nunca puede ser rentable.

En la imagen una página de la revista Ajoblanco del año 1980. Un detalle del Arte y de sus dudas y preguntas, que 40 años después siguen muy actuales.

Las comunidades cerradas de lujo en España

Todos nosotros hemos visto gated communities o Comunidades cerradas en la Costa Brava, en Andalucía, en Madrid o en Miami, en persona o en televisión, las urbanizaciones donde las familias de mucha economía viven como escondidas a los ojos ajenos, entre el agua del mar que les entra por canales, los jardines privados con árboles exóticos donde se comunican entre los vecinos de idéntica procedencia, siempre rodeados eso sí, por fuertes medidas de seguridad activa, y por juegos de entretenimiento natural como puede ser el golf o los hipódromos.

En la medida en que las diferencias sociales entre las diferentes partes de una sociedad se agudizan, se contrastan, más se separan estos grupos sociales del resto, más inseguros se sienten, más seguridad activa requieren. Más se encierran en sus propias zonas de vida. Son las famosas gated communities o Comunidades cerradas, de las que sólo en los EE.UU. se cree que hay más de 30.000, donde se cree que ya viven unos 20 millones de personas.

Estas urbanizaciones no son ni ciudades ni pueblos, son islas de las que salen a comunicarse cuando se sienten seguros y de forma esporádica. Casi disimulando y a ciertos locales del entorno. No forman sociedad, pues ellos creen ser “la sociedad” y todo lo demás los añadidos que necesitan para funcionar. Funcionan en grupo, siempre que sea “su” grupo.

En los países más pobres también existen estas formas sociales de vida. Incluso más acentuadas. Se pueden ver como lugar más cercano a España en nuestro vecino Marruecos. Pero insisto que no es necesario salir de España para verlas de lejos o separadas por el agua.

No pueden ser considerados barrios, pues para ello sería necesario una vida de calle, unos lugares comunes de convivencia abierta a todos. Y en estas zonas esto, aunque parezca lo contrario, no existe. Sí existe la iglesia, el restaurante, el local de juegos, pero poco más. Aunque es cierto que en los últimos años se están construyendo en algunos países, auténticas gated communities de enorme tamaño, con rascacielos, hospitales, escuelas y centros comerciales propios.

Incluso se puede dar el caso, como en alguna zona privada de Zaragoza, donde dentro del mismo recinto quieran convivir diversas formas sociales que no se admiten entre ellas, por la diferencia económica que supone a los ojos de alguno de los grupos. Algo que los diferencia y que curiosamente para la mayoría de nosotros no sería una diferencia. Unos se llaman a los otros de forma despectiva, dejando muy claro quienes son de cada grupo social. Ocupan cuotas de poder en las directivas, se pelean, ocupan espacios propios en sus zonas comunes.

El conflicto puede venir por poseer más o menos terreno alrededor de sus edificios, el que sus viviendas sean chalet o adosados, sean antiguos o nuevos, tengan árboles privados o no puedan tenerlos por algún motivo. El caso es siempre sentirse más y mejores que los que están más cerca.

Aunque algunas comunidades priman tener dentro de sus gated communities a grupos sociales de Clase Media que realizan el trabajo intermedio que les separa entre los obreros que acuden a trabajar desde el exterior y ellos mismos. Asesores, médicos, artistas, personas de un nivel medio que les resulten agradable, diríamos que bufones del siglo XXI que hagan de “amigos” en las relaciones constantes. No es clasismo señalar esto, el clasismo es potenciarlo desde dentro y buscarlo para sentirse más cercanos a la realidad.

Queda claro pues, que eso no son sociedades felices pero la saben buscar o construir, y sin duda tampoco barrios…, ni además querrían serlo nunca. Ellos odian el concepto “barrio” y todo lo que eso supone de unificación social. Pero es su decisión, su forma de sentirse más seguros. Cuanto más se posee, más necesidad se tiene de sentirse seguros. Debe ser que no quieren perder lo que tienes, por ser mucho. En cantidad, claro, no siempre en calidad.

23.7.25

No sabemos si está todo mal, o todo bien


Tal vez haya que seguir preguntándonos todos qué hemos hecho mal, para que todo esté peor de lo que nos gustaría. Esta viñeta de Forges tiene sus años, pero es atemporal, sirve para hoy y servía hace 10 años. Seguimos sin encontrar la manera de olvidarnos de nuestro egoísmo excesivamente personalistas y para nada, y no darnos cuenta que hay que trabajar más el bien común.

18.7.25

Son Banya. Errores urbanos de libro sociológico

Vamos a ver un ejemplo de pequeño urbanismo equivocado, el del poblado famoso por sus problemas con la ley llamado Son Banya, asentado en Palma, en la isla de Mallorca, y que contiene todos los condicionantes sobre lo que nunca se debe hacer para intentar lograr los objetivos que se proponían. 

Por eso mismo, uno debe pensar la posibilidad de que tantos errores son complicados de realizar seguidos y sin parar, por lo que tal vez no falló tanto la planificación, como que tal vez existía un plan determinado para que aquello nunca quedara resuelto de la forma que se pretendía.

El poblado mallorquín de Son Riera, conocido popularmente como Son Banya, y que se levanta todavía ahora junto al aeropuerto de Mallorca y a una zona industrial de Palma, surgió de la necesidad de dar una solución provisional a la problemática de vivienda para la comunidad gitana que se encontraba asentada en el inicio de la actual autopista de Levante.

Con este fin se creó la Asociación Pro Integración de los Gitanos de Mallorca (INGIMA), presidida en su momento por el padre Sabater de los Hermanos Marianistas, que eran titulares y propietarios de los terrenos donde antes había existido un colegio concertado y donde se construyeron —una vez cedido el terreno— un total de 124 viviendas para acoger a una población de unas 600 personas gitanas que en aquel momento vivían en chabolas de madera, hojalata y cartones.

Llevaban ya unos años ayudando a la comunidad gitana en los barrios de El Molinar y el Amanecer, les habían dotado de servicio médico, un ropero de almacén de ropa usada y otros servicios de asesoramiento y atención hacia la población gitana, con profesionales que habían formado desde los Marianistas.

Vivían en unas chabolas inmundas, que el propio Ayuntamiento tiró para dignificar un poco la vida de estas familias que trasladó a Son Riera (Son Banya).

En 1970, INGIMA (Integración de Gitanos Mallorquines) cedió en propiedad al Ayuntamiento de Palma una parte de estos terrenos del hoy Son Banya, y en 1977 el resto de terrenos los cedieron los marianistas a Cáritas Diocesana.  Actualmente, la propiedad de este espacio está compartida entre el Ayuntamiento de Palma y el Instituto Balear de la Vivienda (IBAVI), que en 1995 adquirió la propiedad de Cáritas Diocesana. El pleno del Ayuntamiento, en 1974, creó el Patronato Albergue Son Riera como órgano de gestión del poblado gitano.

Esta imagen es más antigua que la anterior. En la zona izquierda se puede ver el colegio primitivo
Aunque a nivel oficial esta zona de Palma se llama Son Riera, todo el mundo la conoce más por Son Banya por estar cerca de unos terrenos donde había una batería militar con ese nombre. Es una zona —como podemos ver en las imágenes— cerrada, encerrada desde su construcción pues se dejó las vallas del solar de los marianistas, con una única entrada y salida, construido como un auténtico gueto donde se “aparcaba” a las personas que parecían molestar.

Este poblado se construyó como un albergue provisional, para que en un período de 10 años —y trabajando la integración social integral— se lograra que las 124 familias se asentaran entre los distintos estamentos y barrios de la sociedad mallorquina. Nunca se logró.

Las casas contaban en un principio con dos habitaciones, sala-comedor, cocina y un amplio patio individual interior destinado a corral, jardín, huerto o para el uso de animales domésticos. Se puso un alquiler simbólico de cien pesetas mensuales, para crear sensación de normalidad social. Pero enseguida aquella cantidad dejó de pagarse en principio por no tener ingresos familiares muchas de aquellas familias.

Se puso en funcionamiento una escuela, se dotó al poblado de una asistenta social y de una especie de alcalde propio que representara a los vecinos, un administrador que llevaba las gestiones económicas y una persona que se ocupaba de los problemas sanitarios, incluso de un policía municipal que actuaba de mediador si había problemas de relaciones y seguridad.

Se intentó trabajar socialmente desde el principio para que esta comunidad dispusiera de un trabajo estable en fábricas del entorno y de una nueva vivienda adquirida a través de sus propios medios de subsistencia. Se deseaba —equivocadamente— que la comunidad gitana dejara de lado sus propios principios sociales y cambiara todas sus formas de relación con el ambiente, con los suyos, con su propia sociedad, hasta convertirse en ciudadanos iguales al resto. Y todo sin lograrles antes un medio de vida laboral suficiente y estable.

Pero todas las previsiones fallaron, al partir de realidades absurdas. Algunos lo justifican por la crisis económica del año 1973, que supuso un gran retroceso en la labor social del poblado por falta de presupuestos públicos. Pero la realidad nos dice que esto es siempre una labor muy lenta, suave y con trabajos sociales muy complejos de realizar si no hay unas ayudas muy eficaces. Incluso en el caso de lograr que algunas familias cambien su forma de vida, enseguida vienen nuevas personas a ocupar su espacio social. 

En Zaragoza tuvimos el ejemplo en la Quinta Julieta, un poblado realizado de forma muy similar, para derribar el poblado chabolista de la Paz..

Debemos advertir que en sus inicios, el 90% de la población adulta era analfabeta y tan solo un 10% de los hombres del poblado tenían un trabajo estable que les permitiera vivir en condiciones humildes. El resto no tenían trabajo ni posibilidades sociales de encontrarlo. En la actualidad todavía hay un 40% de analfabetos entre sus 400 habitantes. Se cree que unas 22 familias se dedican directamente a la venta de droga de diverso tipo y se sabe que cada día entran más de 800 coches al poblado a comprar droga, mientras la policía está en la entrada al recinto, vigilando que “fuera” no suceda nada y controlando cuando así recibe la orden, quien entra y sale. Parte (no todas) del resto de familias colaboran como vigilantes, o ayudando en tareas sucedáneas.

En la actualidad aquellas casas son auténticos bodrios habitacionales, chabolas insalubres, donde se hacinan ancianos, padres e hijos, y donde la realidad de la droga es más un grave problema incluso para ellos, que un negocio tremendo como muchas veces se nos hace ver. Las familias venden droga que compran antes, su rentabilidad está en la diferencia entre lo que pagan, lo que consumen y lo que venden. La miseria es una constante tremenda e indigna. Las casas están interconectadas unas con otras, para facilitar el paso entre ellas y poder huir o esconderse. Algunas pocas familias sí tiene un gran negocio, pero la mayoría de las personas que allí malviven, son personas que no tienen donde ir, esperando simplemente el final. Hay que señalar que unas pocas grandes familias del poblado disponen de propiedades fuera del mismo, que adquieren con las ganancias de las drogas, y que no utilizan para vivir pues el poblado es “su empresa” y que dejan para sus hijos.

A partir de la década de los años 80 la droga entró totalmente en la vida del asentamiento y se convirtió en un mercado consentido, sin solución social de continuidad, siendo un lugar tremendamente increible para cualquier trabajador social que llega por primera vez y no logra entender tanto abandono, tanta inmundicia, tantos errores constantes. La basura se amontona, las enormes ratas viven con las familias y los niños en muchos casos viven sin escolarizar correctamente. La droga sigue matando.

Se ha intentado entregar viviendas dignas a las familias que desearan abandonar Son Banya, pero solo 15 de estas abandonaron el poblado a cambio de pisos en 2010 y sus chabolas fueron derribadas. Familias sin ingresos que efectivamente, no se dedicaban a la compra venta de droga.

Pero la realidad que no se quiere ver es otra. Todas las grandes ciudades necesitan tener “culo”; los habitantes de Son Banya aunque estén rodeados de ratas no quieren vivir fuera de allí y no quieren irse; los sistemas de seguridad tienen “encerrados” con tapias admitidas a lo que consideran un “mercado ilegal” donde todo el que entra y sale es claramente identificado si así lo quieren hacer los policías.

Es el culo interno de la ciudad. Fuera de las vallas está la limpieza y la fiesta, dentro puede estar moviéndose toda la mierda social. Como sociedad, admitir esto es tremendo, pero es real. Llevamos décadas sin solución, simplemente porque no se quiere, o porque se sabe que según qué tipo de soluciones, es sólo trasladar el problema de sitio. Simplemente cambiar el culo de ubicación.

Hoy se calcula que cada día se “factura” todavía unos 80.000 euros en droga vendida para una población de toda la isla de Mallorca, de mucho turista, vicio y fiesta. Tanto cocaína como heroína, se surte a toda una isla que vive en yates, en discotecas de fiesta o de un turismo que viene al desenfreno total. Es un entramado donde cada escalón va sacando su propio beneficio. La presión de los medios está logrando en los últimos años que Son Banya se está encogiendo como punto de venta de droga, simplemente por haber salido hacia otros lugares —con menos control policial y de los medios de comunicación— los puntos de venta.

Van quedando familias que viven de la chatarra, de las ayudas sociales a cambio de que lleven a sus hijos a los colegios, y la falta de calidad digna en la vida de la personas hace que tras 50 años de su puesta en funcionamiento, aquel proyecto se esté muriendo lentamente, muchas veces sin luz, siempre sin agua caliente en muchas casas, con mucha suciedad, con poca salud social y personal, sin lograr la integración necesaria y demostrando que es un fracaso el proceso de encerrar en un gueto a las familias que no están adaptadas al sistema social habitual. Hace falta mucha más formación social, educacional, laboral, integrar a las mujeres de las familias como líderes de estos procesos, dignificando la vida de las personas pero dotandolas de posibilidades reales de tener ingresos y trabajo estable con arreglo a sus formas de vida y de sociedad.

25.6.25

Somos responsables de no cuidar nuestra sociedad


Andrew McCarthy
, exfiscal de EEUU nos dio una clave en el año 2016, válida para todos los movimientos extraños que podamos observar en las sociedades de todo tipo, aunque él se refería a la suya propia. 

En el fondo es tan sencillo de comprobar “su verdad” como quitar el nombre del artista protagonista y poner el nuestro, el cercano, al que conocemos. 

Somos responsables de la mierda. 

También de la basura y de los errores. 

No ya los actores principales, sino el público, por ir a la función, aplaudir o incluso por no ir y hacer mutis.

“Donald Trump no es la causa del deterioro del nuestra política (o sociedad), sino el efecto del deterioro de nuestra cultura (o forma de entender el momento social que nos rodea)

Nota.: Andrew McCarthy es un exfiscal federal, reconocido comentarista político y escritor conservador estadounidense. Es conocido por sus análisis sobre temas legales y políticos, especialmente en relación con la administración Trump y casos judiciales relevantes. También es un actor y director de cine y televisión.


Europa es de todos los europeos que viven en Europa

Ya la Europa del año 2016 nos advertía con carteles de acogida en las playas que dan al Mediterráneo, que esto se estaba saturando. No son humanitarios pues hablaban de la inmigración que venía sin control, no son dignos de Europa, pero el diario.es de la pluma de Manel nos los refleja muy actuales. 

Europa va camino de la nada, y si hay dudas les podemos preguntar a los alemanes, que ya han empezado a preguntar por las soluciones a la propia Angela Merkel

Europa no es una propiedad de los actuales europeos, no somos nada más que personas que habitamos unos años en este mundo maravilloso donde si cogemos todos. 

Y si alguien es propietario de algo, serán nuestros hijos y nietos, pues nosotros ya estamos algo cansados y viejos. Aunque ahora tengamos 30 años.

Muchos de nosotros somos hijos de la inmigración andaluza, soriana o extremeña. Pero se nos olvida o queremos convencernos de que no es lo mismo.

Posavasos de la cafetería La Pecera en Madrid

Una de las cafeterías céntricas en el Madrid más tranquilo es La Pecera, dentro del Círculo de Bellas Artes de Madrid. 

Abierto a todo el público, con unos precios normales, es un lugar de lujo para estar tranquilos, sobre todo en su interior, al que hay que acceder desde la zona de la terraza de la calle, para no pagar entrada al edificio, donde se pueden ver diversas exposiciones. 

Os dejo el posavasos de La Pecera, como un elemento típico que refleja parte de su historia madrileña.

Fotografías icónicas del fotógrafo César Lucas en Madrid


Una de las fotografías más icónicas de los años de la Transición en España es esta que vemos arriba, de un niño en una manifestación en Madrid. El propio y reconocido fotógrafo César Lucas ha comentado en numerosas ocasiones este momento.

Se publicó en la contraportada de EL PAÍS el 23 de junio del año 1976 Con el tiempo tuvo trascendencia, me dijeron que estaba preparada, pero yo estaba a la entrada de una tienda en la calle Preciados por una protesta vecinal. Vi venir a ese niño tan guapo, subido a hombros de su padre, con ese gesto...

César Lucas ha trabajado para la fotografía española desde diversos medios de presa, desde muy diferentes revistas y temáticas. Desde la fotografía social al desnudo, desde la fotografía de moda al de personajes famosos para revistas internacionales.

Pero siempre con su sello personal que ponía en una forma distinta de lograr las miradas de sus personajes como si realmente fuern eso, personajes de historias.

Otra muy famosa fotografía es la del Che Guevara, una de las primeras que logró publicar y que ha quedado como un icono la consiguió en una visita del Che Guevara a Madrid, en donde con solo 18 años, se le asignó acompañar durante el fin de semana del 13 y 14 de junio de 1959, a los seis meses del derrocamiento del dictador Fulgencio Batista, al Che Guevara por una visita a Madrid.

Logró esta imagen icónica, que en su momento publicó el diario Pueblo sin darle mucha importancia, que la consiguió años después. La oportundiad del momento, de esa soledad casual pues el Che iba con varias personas de escolta y de acompañantes de seguridad, incluidos el periodista Antonio Olano.

El Che iba camino de El Cairo donde se iba a celebrar la primera Cumbre de Países no Alineados y paró en Madrid para hacer tiempo y descansar. Esa imagen supera a todas las demás de esos días, por esa soledad, por el Arco del Triunfo del fondo, por la mirada del personaje vestido de militar al lado contrario al cartel por donde se indica que deberían ir los peatones, etc.

No es una simple fotografía, es una historia que sin palabras, contó el fotógrafo César Lucas.




17.6.25

El tacto, esa importante medicina


Hoy os quiero hablar de la voz. De los sentidos. Y es que, cuando alguien está en un proceso de salud complejo, que el paciente sienta cerca a un ser querido, ayuda a estar mejor, ayuda en su recuperación.

Da lo mismo que nos cojan de la mano, o que nos quieran oír la voz, el simple hecho de sabernos/saberse acompañado/a en ese momento, es muy beneficioso para la persona enferma.

El tacto es de gran importancia para los seres humanos y puede ser beneficioso para reducir el dolor, de hecho, es el primer sentido que se desarrolla en los recién nacidos y la forma más directa en que interactuamos con el mundo.

Por otro lado, la voz de una persona conocida es muy importante cuando estamos enfermos porque permite conectar de manera emocional. La voz te ayuda a identificar a la persona, a sentirte más seguro y a recibir palabras de aliento que pueden mejorar tu ánimo y aliviar la ansiedad.

Ocurre lo mismo con las imágenes, con las fotografías, también ayudan a establecer una conexión emocional con las personas que salen en la imagen. Te ayudan a recordar y a tenerlas cerca aunque no sea posible.

Y añado: Hace unos días un profesional de la psicología me reafirmó que simplemente estar a su lado, acariciar, sostener su mano, preguntar qué necesita, escuchar —porque quizás no somos personal sanitario pero sí que somos el vínculo más cercano de la persona enferma— puede calmar, puede hacer que el enfermo mejore.

Os pongo algún caso. Una noche, una persona cercana me dijo que necesitaba oír mi voz, que quería sentir que de alguna manera estaba ahí en una noche de insomnio y ansiedad. Le mandé un par de audios de WhatsApp y su respuesta fue: —Gracias, me has ayudado a calmarme.

Yo, me volví a dormir satisfecha por haberle ayudado.

Pero esto, también funciona si estás con gripe, con migraña, y alguien simplemente te coge la mano, o si estás en la cama de un hospital esperando una prueba, o llevas ingresado/a varios días.

La voz, el tacto, la vista (ahora por medio de videollamadas o fotos en el móvil, todo es posible), o incluso el olor agradable que nos recuerde algo positivo.

Las personas de nuestro entorno, padres, hermanos, pareja, amistades… están para estar… cerca. En un momento de fragilidad, son importantes para mejorar nuestro ánimo, nuestra recuperación y nuestra salud mental, que sin duda influye en todo o casi todo lo que hacemos.

Laura Puente Ajovín

9.6.25

Dos preguntas a Joseph Stiglitz, Nobel de Economía, en su visita a España


Recojo dos respuestas de Joseph Stiglitz, Nobel de Ec
onomía, de una entrevista que nos entrega el diairo Público en el verano del año 2011, y que ya no se puede consultar en la hemeroteca
. En 2001 ganó el Premio Nobel de Economía "por su análisis de los mercados con información asimétrica".

¿Deberíamos ir más lejos en la creación de empleo?

Hay que prestar atención al corto plazo y al largo plazo. Sin entrar en detalles, la reforma del mercado laboral ayudará en el largo plazo, pero no incidirá en el problema real ahora que es la falta de demanda. 

Hay algunas cosas que se pueden hacer para aumentar el consumo, como mejorar el crédito y jugar con los instrumentos fiscales. 

Lo que sí le puedo decir es que el tipo de políticas económicas que están implementando los partidos conservadores a lo largo de Europa son una receta para el desastre.

En Alemania son conservadores y no parecen ir hacia el desastre.

La razón por la que Alemania lo está haciendo bien es por que se ha basado en el modelo social europeo, en la protección social. Cuando cayó su economía, lo hizo incluso más que la de EEUU, pero el empleo no se destruyó y sentó las bases de la recuperación. 

En EEUU, hace ya cinco años que estalló la burbuja y todavía uno de cada seis estadounidenses quiere un empleo a tiempo completo que no puede obtener. Hemos fracasado. 

Y tenemos un mercado laboral muy flexible, lo que deja claro que la flexibilidad laboral no es la solución.



¿Tiene depresión tu pareja? 10 consejos para ayudar


Si estás cerca de alguien que lucha contra la depresión, no siempre se puede mostrar con facilidad lo que tu lo aprecias y amas y que estás allí para apoyarle. 

Un día el enfermo puede parecer que está bien y el siguiente estará triste, distante y pueden aparentar que no desean el contacto con nadie, ni la relación con los familiares y amigos que lo acompañan. Deseará estar solo, sin compañía, sin pareja. 

Esto es muy duro para todos, pero es normal.

Es importante que sepamos estar siempre cerca de ellos les damos confianza, que es una excelente forma de ayudar a la pareja, a nuestro amigo o familiar, y así lograremos que tenga menos episodios graves de depresión. 

La enfermedad mental es tan real como la enfermedad física (pues el problema depresivo es en realidad un problema físico también) y ellos nos necesitan tanto como nos necesita una persona enferma que necesita ser atendida, si tuviera una fuerte gripe, unos cólicos o unas neumonías.  

Veamos ahora 10 pasos a tener en mente para ganar la batalla de la depresión entre los dos miembros de la pareja.

1. Ayudemos a mantener el orden de sus tareas

Cuando una persona comienza en la espiral de la depresión, pueden sentir que él se están desacelerando ante la vida, mientras que el mundo que les rodea se acelera brutalmente. 

El email puede terminar amontonándose, los platos puede acumularse en el fregadero, no apetece planchar pero se dice que cada vez hay más y más, mientras que la persona deprimida comienza a sentirse cada vez más abrumado por su rutina diaria y no pueden mantener el ritmo. 

Si les ayudamos en sus tareas se sentirán menos agobiados, verán que es menor el trabajo y que ellos si pueden con todo.

2. Fijemos con ellos una comida saludable y organizada.

Un deprimido puede hacer una de estas dos cosas cuando están en un estado de depresión. Pueden comer muy poco, o pueden comer en exceso. 

Comer de esta manera o dejar de comer, sólo degradará la salud del que tiene depresión, haciendo que crezca su estado depresivo. Hay que intervenir con tranquilidad con comidas compartidas, agradables, sanas, mucha fruta, verduras y frutos secos.

3.Consigue que las personas deprimidas salgan fuera, al campo, a la naturaleza.

Los beneficios de sacar fuera de su rutina, de su hogar a una persona deprimida, son enormes. Y es, posiblemente, la última cosa en la tierra que su pareja deprimida querrá hacer. 

Llévalos a estar en algún lugar cerca de la naturaleza. Prepare un picnic y túmbate en el sol, tomar una caminata pausada con ellos y si no tienen ganas de hablar pues en silencio o plantar algo en un jardín. 

Estar descalzo en la tierra, "pisando la tierra" ayuda al contacto natural entre la tierra y el cuerpo y revertir los efectos de vivir en un mundo frío y artificial, y cavando en el suelo en realidad puede actuar como un antidepresivo, como una medicina de bacterias sanas que nos está entregando el suelo con su contacto. 

El Sol aumenta la producción de vitamina D, que puede ayudar a aliviar la depresión.

4. Pídele que te ayuden a entender lo que están sintiendo.

Si su pareja es capaz de explicar lo que le está pasando, hablemos de ello pues les ayudará a entender mejor lo que está pasando y puede dar una idea de un plan de acción, para ayudar a nuestro compañero de vida. 

Sentirse solo es común en una persona deprimida y casi nada es capaz de combatir ese sentimiento, así que hablar de ellos le ayudará a aliviar la severidad y a reducir la duración de la depresión.

5. Animamos a que se centren en el auto cuidado.

Las personas deprimidas a menudo dejan de responsabilizarse del cuidado de sí mismos. Ducharse, afeitarse o depilarse, ir al médico o al dentista; todo les parece demasiado difícil, y que no merecen ser tenido en cuenta pues ellos están tan graves que todo lo demás no tiene importancia. 

Esto puede agravarse rápidamente y convertirse en mayores sentimientos de inutilidad, ya que ellos mismos se dicen: "Ahora soy un desastre, nadie podría amarme". Ayude a tu ser querido para ser proactivo. 

Diles algo parecido a que: "me voy a lavar los platos, ¿por qué no te vas a disfrutar de un baño de burbujas?" Hay que animarles, no ordenarles.

6. Abrazarse entre nosotros es muy importante.

Los estudios demuestran que un abrazo sincero que dura más de 20 segundos puede liberar sustancias químicas para sentirse bien en el cerebro y elevar el estado de ánimo tanto del donante como del receptor. 

Las personas deprimidas a menudo no quieren ser tocadas, pero un abrazo sincero con ninguna expectativa de nada más, puede dar a su pareja una gran cantidad de autoestima, de ánimo nuevo. Del sexo no vamos a hablar, pues es un tema más complejo. 

Interviene la medicación, el estado deprimido, la sensación de muy baja autoestima. Simplemente estaremos allí para adivinar qué se necesita en cada momento. 

Y consultar sobre este tema con el profesional médico con la misma naturalidad como cuando le preguntamos por el dolor de un costado, la tos o que meamos poco.

7. Ríete con ellos. Busca la risa con ayuda de la tele, de revistas, etc.

Contar una broma tonta, ver una comedia o ver una película de risa, animará a su pareja a reír a pesar de sí mismo. La risa libera endorfinas y los estudios demuestran que en realidad puede contrarrestar los síntomas de la depresión y la ansiedad. Busquemos el humor como terapia, pues es muy útil para resolver todos los problemas.

8. Aseguremos que entre los dos podemos manejar nuestros sentimientos.

Tu pareja puede sentirse inútil, enojado e incluso culpable, simplemente por que él está deprimidos. Ellos pueden tener miedo de que van a terminar abandonados y solos, porque nadie va a estar todos los días con sus episodios deprimentes. 

Tranquilizar a los que viven la depresión es fundamental y explicarles que la suya es una relación a largo plazo y que no va a huir de él o de ella porque tienen una enfermedad.

9. Desafía sus pensamientos destructivos.


La mente de una persona deprimida puede ser un bucle sin fin de pensamientos destructivos y dolorosos. "Soy indigno de ser amado, soy un fracaso, estoy feo, soy estúpido e inválido". 

Desafía estas ideas tan negativas con la verdad. "Tú no es que seas digno de ser amado, es que simplemente te amo. 

Tú no eres un fracasado, observa todas las cosas que has logrado en tu vida y las que seguro que te quedan por lograr".

10. Recordemos juntos por qué motivo os amáis.

Mirar juntos las imágenes de los momentos felices que habéis tenido juntos. Diles cuales son tus cosas favoritas y los momentos tan felices que recuerda de esos tiempos. 

Recordar el pasado sobre vuestra relación y todas las cosas positivas que os han ocurrido, y volver a recordar a tu pareja que le amas aunque ahora sea complicado de entenderlo igual que hace unos años pero que todo se modificará para bien en un poco de tiempo.

Laura Puente Ajovín

Bella imagen de la ciudad de Nuremberg

Esta imagen, casi una postal, es un rincón de la ciudad alemana de Nuremberg, un clásico paisaje alemán preparado para ser bello, para dejarse fotografiar. Parece una imagen artificial, de parque temático, pero es urbanismo de una ciudad. Solo eso.

Los edificios llevan bastantes años, algunos reconstruidos pues la ciudad quedó literalmente destruida en los años 40. Y se podría haber dedicado ese espacio verde que vemos a ser un simple mirador, a ser un espacio anodino más. 

Pero en cambio alguien decidió plantar unos árboles en tan poco espacio. Es el contrapunto a la postal. Sin el verde esos edificios rojos tendrían menos sentido estético. El verde ayuda a la tranquilidad de los espacios, de los paisajes.

José Luis Sampedro opinó sobre el movimiento del 15M

El escritor y filósofo José Luis Sampedro defendió en el año 2011 en un encuentro con POR (Piensa Opina Reacciona), organizado por la Cadena Ser y Prisa, sobre el movimiento 15-M. "Mi reacción inmediata es sumarme a lo que esto representa", dijo José Luis Sampedro. "No es verdad que sean una generación perdida, por esto ahora estáis donde estáis. Estáis amargados, desconcertados, hace unos meses no estabais, pero ahora estáis presentes".

José Luis Sampedro, añadió que es "absolutamente esencial" pensar en el futuro. "Que la gente se lo crea. Una prueba del error actual es esta idea", comentó José Luis Sampedro, que insistió en la dificultad de "conseguir un pensamiento libre" en la sociedad actual. El motivo, según él, es que "la democracia está pervertida y secuestrada".

El filósofo, subrayó que "el partido que gobierne debería tener tres P: pueblo, plaza y palabra. La idea del pueblo para el pueblo".

Frente a ello, explicó que el sistema actual está "dominado" por otras tres "palabras mágicas": "Productividad, competitividad e innovación", que deberían ser sustituidas, a su juicio, por "repartición cooperación y recreación".

En cuanto a las protestas del 15-M, aconsejó a los jóvenes manifestantes que no incurran en actos violentos. "No tenéis derecho a recurrir a la violencia, porque tenéis la razón y el futuro. El sistema está roto y perdido, por eso tenéis futuro".