11.9.25

La injusticia o la mala suerte, no debe paralizarnos



La justicia es un concepto algo abstracto para valorar nuestra vida y cómo nos va en ella. La vida en sí misma no es injusta; tal vez podamos tener mala suerte o poca suerte, pero tal vez es que no hemos salida a buscarla, no hemos querido cuando debíamos, tomar decisiones arriesgadas o costosas, o que requerían un esfuerzo nuestro muy alto. Todos los esfuerzos requieren un grado de riesgo, pero a veces hay que tomarlo. 

Tal vez es que simplemente no sabemos detectar la hierba cuando empieza a crecer, y llegamos algo tarde a la cosecha. 

Si pensamos que todo es cuestión de suerte o de justicia, no lograremos salir de los atolladeros, no seremos capaces de avanzar.

Efectivamente algo de injusticia hay en la vida —no debo negarlo nunca—, pero eso no nos debe servir tampoco nunca, para encontrar la excusa ante nuestros problemas. 

Si te quejas por la mala suerte, por las injusticias de la vida, no estarás avanzando en la solución de los problemas. De tus problemas.

Si creemos que la injusticia nos afecta, si pensamos que es precisamente la injusticia la que nos invalida, nos quedaremos cojos de soluciones para afrontar los problemas que tenemos.

No te compares con nadie, no busques la justicia o la suerte en la vida de los demás. Tú te perteneces, eres tú quien debes buscar tus soluciones. 

La gente que te rodea te podrá ayudar, pero si les pides soluciones importantes, mucho cuidado, pues la mayoría de ellos prefieren encontrar soluciones para ellos mismos.