El riesgo de padecer un ataque al corazón en personas con insomnio varía entre un 27% a un 45% más que entre la gente que raramente experimentan problemas para dormir, según un estudio que se basó en 52.610 adultos noruegos.
Los investigadores relacionaron el riesgo de sufrir un ataque cardíaco a tres síntomas importantes del insomnio.
En comparación con las personas que nunca o casi nunca tienen estos problemas, las personas que tuvieron problemas para conciliar el sueño casi a diario en el último mes tenían un riesgo de ataque cardíaco un 45% más alto; los que tuvieron problemas para permanecer dormidos muchas de las noches en el último mes tenían un 30% más de riesgo de sufrir un ataque; y aquellos que se despertaban con la sensación de haber descansado mal más de una vez a la semana, tenían un 27% más de riesgo, que las personas que raramente tienen problemas con el sueño.
En comparación con las personas que nunca o casi nunca tienen estos problemas, las personas que tuvieron problemas para conciliar el sueño casi a diario en el último mes tenían un riesgo de ataque cardíaco un 45% más alto; los que tuvieron problemas para permanecer dormidos muchas de las noches en el último mes tenían un 30% más de riesgo de sufrir un ataque; y aquellos que se despertaban con la sensación de haber descansado mal más de una vez a la semana, tenían un 27% más de riesgo, que las personas que raramente tienen problemas con el sueño.
Los problemas del sueño son muy frecuentes pero también hoy son fáciles de tratar, es fundamental el hecho de que las personas sean conscientes de esta relación entre el insomnio y los ataques al corazón y su salud, y que hablen con su médico de familia si están teniendo problemas con el sueño.
Pero no solo el insomnio es causa de provocar problemas en el corazón, hay factores que influyen en la debilidad coronaria y que debemos conocer y tener en cuenta como la edad, el sexo, el estado civil, el nivel educativo, la presión arterial, el colesterol, la diabetes, el peso, el ejercicio y el trabajar por turnos, además de la depresión y la ansiedad y el estrés.
Se calcula que hasta un 33 % de la población general padece, al menos, un síntoma de insomnio, según los investigadores. Otros estudios previos menores también han relacionado el insomnio a problemas como la presión arterial alta y la inflamación del cuerpo en general.