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Debemos cuidar la izquierda, para no volver a pasar por el aro

Todos nosotros, vosotros también, estáis observando esas trifulcas idiotas de las distintas izquierdas, incapaces de serenarse y ponerse a pensar. ¿Dónde están las ideas, los proyectos, los programas, las ganas de trabajar? Estamos desde la izquierda tontos de baba y encima no nos damos cuenta. Así que cualquier espabilado de derechas se aprovecha y hace de su capa un sayo y nos tapa el sol.

Me daría igual hablar del PSOE estatal o del aragonés. Me daría parecida gana hablar de Podemos estatal si es que existe que del Podemos zaragozano junto a Zec. Podría añadir a la sopa una IU perdida y un PC reencontrado. Incluso debería añadir a una CHA que no sabe bien si hablarse con Puyalón o dejarse odiar.

Los ciudadanos de la calle, como no encuentran referencia válida o al menos que se mantenga con las mismas ideas unos meses…, escapa despavorida y se cambia o se esconde de la política.

Tranquilos, esto es cierto, pues tampoco hay prisa para que la izquierda busque soluciones. Al menos nos quedan 6 años de mayorías absolutas de la derecha. Dará igual cómo lo hagan. Y en seis años da para mucho a una izquierda que para entonces no la conocerá ni…, no la conoceremos. O irán aumentando esos seis años en bloques de cuatro en cuatro.

Debemos desde la izquierda empezar a saber qué queremos para la sociedad de 2025.

Debemos sumar a personas de una cantidad de ideas y conceptos amplia, y que ahora están huidas

Debemos diseñar el territorio sobre el que queremos actuar. Territorio social sobre todo.

Debemos dejarnos de pensar que estamos en el siglo XX o en un mundo sin globalizar.

Debemos plantear la edificación una nueva sociedad con unos nuevos conceptos sociales, económicos, laborales, educativos, comunicativos.

Hay que admitir que incluso los conservadores más zotes, son ya tan inteligentes como nosotros para acceder a toda la sociedad.

Hay que admitir que el capitalismo es ya de laboratorio y no se ve, no da la cara, no tiene rostro humano, no juega a ganar a la izquierda en el terreno de la democracia. Pasa y piensa, decide con arreglo a sus experimentos.