Páginas

Los anuncios de colonia son contraproducentes

Estoy seguro, queridos hombres, que no habéis hecho ni puto caso a los miles de anuncios de perfumes para todos los sexos posibles e imaginarios que nos anuncian por la televisión. Qué impertinentes con sus bellezas, sus músicas empalagosas y sus tonos cálidos.

Habéis hecho muy bien, pues lo que se paga es el frasco de cristal y la marca, lo de dentro no vale casi nada y se fabrica en toneles, a granel. 

Para oler bien lo primero es estar muy limpio por fuera y por dentro y luego si acaso añadirse unas gotas de amor y de positivismo. Lo demás viene dado.